Originalmente, creamos Disroot por necesidades personales. Buscábamos software que pudiéramos usar para comunicarnos, compartir y organizarnos dentro de nuestros círculos. La mayoría de las soluciones disponibles carecían de los elementos claves que nosotros consideramos importantes: nuestras herramientas debían ser **abiertas**, **descentralizadas**, **federadas** y **respetuosas** de la **libertad** y la **privacidad**.
Mientras buscábamos esas herramientas, encontramos algunos proyectos realmente interesantes, proyectos que creemos que deberían estar disponibles para cualquiera que valore principios similares. Por lo tanto, decidimos reunir algunas aplicaciones y compartirlas con otros. Así es cómo Disroot empezó.
Con el funcionamiento de Disroot esperamos cambiar la manera en que la gente habitualmente interactúa en la web. Queremos alentar a las personas a **liberarse** de los "jardines vallados" del software popular y cambiar a alternativas abiertas y éticas, ya sea en nuestra plataforma o en otra (o incluso a hospedar la tuya propia).